Un toque de legumbres para verano, rico en calcio, energético, fácil de tomar y, por supuesto, fresquito. Ideal para la inapetencia que provoca el calor.
Ingredientes:
200 grs. de garbanzos (versión rápida más abajo)*
1 patata
1 zananoria
1/2 cebolla o puerro (la parte blanca)
1/2 diente de ajo (sin gérmen central)
1 cucharadita rasa de cominos
2 yogourts naturales
2 ó 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas de zumo de limón
sal (o jengibre en polvo)
Poner a remojo los garbanzos la noche anterior.
Cocer los garbanzos en un fondo de agua o caldo (de verduras, pollo o consomé) junto con la patata, la zanahoria y la cebolla, peladas y cortadas en trozos. En una olla rápida a pueden estar listos en unos 10 minutos.
Pasar por la turmix los garbanzos y las verduras, con el caldo y el ajo, hasta que se consiga una crema fina. Verter en un bol o una jarra ancha y mezclar, batiendo, los yogourts, el zumo de limón, los cominos (mejor, majados en el momento), el aceite y la sal o el jengibre. Poner a enfriar en la nevera hasta la hora de tomarla. Si quedase muy espesa, aclarar con caldo.
Servir en tazas de consomé espolvoreada de pimentón dulce y, si gusta, con un chorrito fino de aceite de oliva virgen extra.
* Por supuesto, se pueden sustituir por garbanzos cocidos. En ese caso, recomiendo aclararlos bien al grifo del agua caliente, dentro de un colador grande, hasta que dejen de soltar espuma.
También se puede prescindir de la zanahoria, la patata y la cebolla y utilizar, para triturar los garbanzos, caldo limpio de verduras (si es de tetrabrick, que sea de excelente calidad y sin conservantes ni colorantes).
Otra variante es usar el caldo de cocer una pechuguita de pollo y servir con una cucharada de pollo picadito de copete. O caldo de cocer unas gambitas y adornar con ellas la crema rematando con un ligero toque de mahonesa con ajo.
Ya irán viendo qué versión les gusta más o si prefieren alternarlas todas e, incluso, inventar la suya. Además, esta receta sirve para invierno sustituyendo los yogourts por una menor cantidad de nata o queso tipo Quark. Y, si quiere probar más variaciones, cambie los cominos por yerbabuena, albahaca, perejíl o cilantro.